Una tormenta de cometas
Esta concepción artística ilustra una tormenta de comentas
alrededor de una estrella cercana a la nuestra (59 años luz), llamada Eta Corvi
(η Corvi). La evidencia de este aluvión nos la facilita el Telescopio espacial
Spitzer de la NASA,
cuyos detectores infrarrojos obtuvieron indicios de que algunos cometas se desintegraron
recientemente tras colisionar con un cuerpo rocoso. En esta ilustración se
muestra a un gigantesco cometa chocando contra un planeta rocoso, despidiendo
al espacio nubes de polvo ricas en hielo y carbono, al tiempo que deposita agua
y elementos orgánicos en la superficie del planeta. Un brillante relámpago rojo
representa el momento del impacto en el planeta. La amarilla-blanca Eta Corvi
se muestra a la izquierda, también rodeada de cometas que avanzan hacia ella.
El telescopio Spitzer detectó trazas espectrográficas de
hielo (de agua), componentes orgánicos y rocas –principales ingredientes de los
cometas- alrededor de Eta Corvi. Esta es la primera vez que se detecta
evidencia de una tormeta cometaria alrededor de otra estrella. La edad de Eta
Corvi – alrededor de mil millones de años- es coherente con el suceso referido,
un bombardeo de cometas, el mismo
acontecimiento protagonizado por nuestro sistema solar cuando este contaba
entre 600 y 800 millones de años de edad, hecho que se conoce como Late Heavy
Bombardment (bombardeo intenso tardío).
Los científicos dicen que este fue provocado, en nuestro
sistema solar, por el desplazamiento de algunos planetas exteriores, que, al
interferir en sus trayectorias, empujaron a algunos cometas de hielo hacia el
interior del sistema solar. Estos cometas dejaron nuestra luna cubierta de cicatrices y acribillaron los planetas
interiores. Además, quizá incluso trajeron materiales a la Tierra que ayudaron a
desencadenar el comienzo de la vida.
Saber más
La constelación del Cuervo. Corvus
es una pequeña constelación situada entre Virgo y Cráter (la Taza o la Copa). Tiene 11 estrellas
visibles a simple vista entre las que destacan α Corvi (Alchiba), β Corvi
(Kraz) y γ Corvi (Gamma Corvi o Gienah Gurab)
La denominación de las estrellas en cada constelación
(denominación de Bayer), se realiza asignando a las estrellas una letra griega
(alfa, beta, gamma, etc…) en orden a su magnitud aparente (brillo), y a
continuación, el genitivo del nombre de la constelación.
Veamos algunos ejemplos:
Los nombres latinos de las constelaciones Centauro, Orión y
Cuervo, son, respectivamente, Centaurus, Orion y Corvus. Y sus genitivos (caso
usado para la función de complemento del nombre) son Centauri, Orionis y Corvi.
Ahora veamos los nombres de algunas de sus estrellas: α
Centauri (Alfa del Centauro), β Orionis (Beta de Orión, conocida como Rigel), o
la que nos ocupa, η Corvi (Eta del
Cuervo).
Hay que precisar, sin embargo, que, en algunos casos, el
orden de asignación original de Bayer es incorrecto (no siempre la estrella más
brillante tiene asignada la α). Este es el caso de la constelación a la que
hacemos referencia en este artículo, Corvus, cuya estrella más brillante es en
realidad γ Corvi (Gamma Corvi); y α Corvi es solo la quinta más brillante.
Referencias.
La primera parte de este artículo (Tormenta de Cometas) es una traducción,
realizada por el autor de este blog, del artículo “Storm of comets” aparecido
en la “Image of the Day Gallery” de la página web de la NASA: http://www.nasa.gov/multimedia/imagegallery/iotd.html
Crédito de la imagen: Image Credit:
NASA/JPL-Caltech
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A mí estas cosas del universo me sobrepasan y me dan un vértigo que me mareo.
ResponderEliminarY encima, esto de "quizá incluso trajeron materiales a la Tierra que ayudaron a desencadenar el comienzo de la vida" tiene mucha enjundia, porque quire decir que somos de origen extraterrestre, ¿no? Fascinating, indeed.
Lo fascinating es el atrevimiento de ponerme a traducir articulitos en inglés. Si quieres, puedes ver el original en el enlace y luego hincharte de reír con la traduccioncita que he perpetrado. En cuanto al tema del artículo, sí que es interesante, pues he visto, consultando en google, que un montón de gente ¡ha hecho lo mismo que yo! con el dichoso artículo.
ResponderEliminarPor un lado, me decepciona no haber sido original, pero por otro me alegra ver que hay gente con los mismos intereses. Por cierto, algunas traducciones son incluso peores que la mía...
Gracias por tus coms. ☺ ☻
Pues no seas tan modesto, que la traducción está perfectamente, muy profesional y experta.
EliminarHe dicho.
Muchas gracias por tus muy benevolentes y ponderados juicios. Una reflexión: la traducción tiene al mismo tiempo la vertiente utilitaria (para que la gente se entere de algo escrito en otro idioma), pero también la creativa. Sospecho que hay gente que olvida esta última y así salen traducciones con escaso valor literario, es decir, lo hacen de cualquier manera de modo que más o menos se entienda el texto. Pero pienso que el traductor debe hacer su trabajo con cierto cariño, para que el resultado sea bueno (en calidad) y ameno(agradable de leer). Hay que intentarlo...
Eliminar¿Tiene todo ésto algo que ver con las lluvias de estrellas que se suceden a lo largo del año y que se pueden ver desde nuestro planeta?. Tengo mucha curiosidad, porque lo necesito para el guión que estoy escribiendo. Creo que el 13 de agosto hay una lluvia de Perseidas.
ResponderEliminarBueno, centremos el tema: en el artículo se habla de tormenta de cometas, es decir, la caída o llegada de muchos cometas al mismo tiempo. Esto es un hecho extraordinario y ocurre quizá una vez en la historia de un sistema solar, y posiblemente cuando aún está en formación y, por la tanto, inestable. Posteriormente, los planetas se asientan en sus órbitas y las fuerzas gravitatorias se equilibran, etc. Los cometas también adoptan una órbita alredeor del sol, que suele ser muy excéntrica,y según su periodo pasan cerca del sol( perihelio) una vez cada 50, 70, 100 años,etc. Es muy improbable que choquen o pasen cerca de un planeta. Lo otro, las lluvias de estrellas son lo que se llaman meteoritos, que pueden tener también su origen en los cometas. Los cometas normalmente están formados de hielo y roca. Cuando se acercan al sol, se derrite, se funde, una parte de su masa y esta queda suspendida (orbitando) en el espacio en forma de partículas pequeñas, como granos de arena, más o menos. Si una nube de estas partículas queda cerca de la órbita de la Tierra, esta, en su movimiento de traslación, la alcanza y por atracción gravitatoria hace que caigan hacia la Tierra. Al atravesar la atmósfera se desintegran por el calor de la fricción con el aire (dado que se mueven a grandes velocidades) y ello hace que dejen esos característicos destellos en el cielo. Bueno, esto es superresumido. Tendrás que buscar más info. Para empezar está bien la wiki...http://es.wikipedia.org/wiki/Perseidas
ResponderEliminarOtro sitio interesante que habla del tema. No me gustan mucho algunos comentarios que hace el autor y tiene algunos descuidos ortográficos, pero la información que ofrece está bien
ResponderEliminarhttp://www.astroava.org/index.php/articulos/93-meteoritos-meteoros-y-aerolitos.html
Por cierto, una rectificación sobre el tamaño de los meteoritos de las perseidas y demás. Es cierto que algunos son como granos de arena, pero también los hay del tamaño de granos de arroz, lentejas y "chinas" más grandes. Luego hay otros meteoritos más grandes vagando por ahí, como explica el artículo indicado. Buen verano.
A ver, esto es una prueba para ver sis oy capaz de poner un link en el comentario
ResponderEliminarmeteoritos, meteoros y aerolitos
Pues sí, eres capaz, porque el link funciona 'ferpectamente' :-D
EliminarGracias por probar el link. Esto de escribir en HTML es muy práctico. Ya voy aprendiendo a hacer cosillas.
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