jueves, 28 de agosto de 2014

Bodas de Plata de Voyager 2 y Neptuno.


                     
  El pasado 25 de Agosto se cumplieron 25 años del histórico paso (flyby*) de esta pionera nave junto al último planeta de nuestro sistema (aunque por aquel entonces no era considerado así: aún faltaban diecisiete años para que la UAI desposeyera de dicho status al pequeño Plutón).

  Voyager 2 pasó muy cerca de Neptuno, a unos 5000 km. También se realizó un cambio de trayectoria posterior a fin de acercarse a Tritón, su mayor luna.

  Voyager 2 realizó importantes descubrimientos durante su visita a este gigante gaseoso, además de enviar las primeras imágenes del mismo, ya que nunca antes se había tenido ocasión de contemplarlo desde tan cerca. Conocimos, gracias  a este misión, la Gran Mancha Oscura, un gigantesco ciclón que recorre el hemisferio sur del planeta y que tiene el mismo diámetro que la Tierra; también supimos de la masiva presencia de metano en su atmósfera, hecho que le confiere ese característico color azul oscuro –ya que el metano absorbe la frecuencia roja del espectro solar-; los magnetómetros de la nave descubrieron un potente campo magnético, misteriosamente desviado con respecto al eje de rotación. Además, al paso de Voyager se hicieron evidentes seis pequeñas lunas desconocidas hasta entonces, ya que por su tamaño no habían podido ser observadas desde la Tierra. Sus nombres: Náyade, Talasa, Despina, Galatea, Larisa y Proteo.