El amanecer del hombre

 Comentarios. 2001, odisea espacial. X. El Amanecer del Hombre

Africa oriental. Año 4.000.000 a.c.

  Una serie de cambios climáticos, que se traducen en fuertes aumentos de las temperaturas, está provocando la conversión de antiguas zonas boscosas en sabanas, produciendo una relativa desertización del medio. El agua escasea. Los antiguos cursos continuos y masas lacustres se han visto reducidas a inconstantes arroyuelos y pequeñas charcas que sobreviven a la evaporación en las escasas zonas umbrías. La estación de lluvias se reduce ya  a solo unas pocas semanas al año.

  En este medio, los ociosos primates que habían medrado a la sombra de junglas cargadas de frutos y bayas estan en franco retroceso, replegándose a zonas ecuatoriales.

  Sin embargo, algunas de estas criaturas están experimentando un salto evolutivo que desembocará en el género conocido como australopitecos, unos primates que llevan la semilla de la evolución del hombre ya indeleblemente marcada en sus genes. Pues la presión ambiental está seleccionando mutaciones que producen individuos con menos pelo y una mayor dotación de glándulas sudoríparas, lo que les hace más adaptables a las nuevas condiciones. El pelo como elemento termorregulador pierde su eficacia a partir de ciertas temperaturas y se convierte en un estorbo. La relativa desnudez, que se habrá generalizado dentro de un millón de años, acompañada de una mayor presencia de glándulas sudoríparas -quizá por reconversión de los folículos pilosos vacíos- es más efectiva para la refrigeración corporal en medios calurosos.

  Otro logro importante en la lucha contra el calor es, ni más ni menos, la posición erguida, que aleja del suelo a la mayor parte del cuerpo. Efectivamente, en entornos desprotegidos de la radiación solar, es decir, fuera del "palio" de la jungla o el bosque, el suelo recibe gran cantidad de calor. Así, la posición erguida aleja al individuo de la zona más caliente cercana al suelo. Por tanto,  aquellos que dadas sus condiciones óseas son capaces de mantenerse erguidos durante cada vez más tiempo, disfrutarán de un alivio añadido contra el calor, pues, la parte superior de su cuerpo quedará en contacto con capas de aire relativamente más frescas. La bipedestación, en cualquier caso, añade otras ventajas en el entorno mencionado, ya que permite otear la lejanía y liberar las extremidades superiores para otras funciones. Estas son las ventajas evolutivas que podrían facilitar el éxito de esta especie y su subsiguiente evolución hasta el ser superior que dominaría la tecnología y el lenguaje.

  No obstante, la escasez de comida, ya que el nuevo entorno es mucho más pobre en especies vegetales, seguirá siendo la gran amenaza para el futuro de este incipiente "mono desnudo" destinado a coger las riendas del mundo.

  Así que, una ayudita del exterior no vendría mal...

 

Africa oriental. Año 3.999.999 a.c.

  Un día más en la larga estación calurosa acaba, y el manto  de la noche vuelve a caer sobre estas pobres criaturas, con su carga de oscuridad y miedo. Todos los individuos de su grupo dormitan apretados en la gruta que les sirve de refugio, pero Moon Watcher, desafiando las alarmas que su propia mente le transmite para que se proteja de los peligros de la noche, permanece en el exterior, acuclillado en un saliente de la pared rocosa, como una gárgola intemporal. Moon Watcher, fascinado por las luminarias que pueblan el cielo, observa como trás el crepúsculo, este  se va encendiendo en millones de luces que sus congéneres nunca llegan a apreciar, pues corren a esconderse con los últimos destellos del sol, antes de que aquellas se hagan evidentes. Y de pronto, allí, en el borde del mundo, aparece la más grande moradora de la noche, su diosa, esa cara sonriente y bella que le insufla fuerzas, que le consuela de los trabajos del día, que le enseña que el mundo es más grande de lo que él jamás podrá comprender. Aún sabiendo ya, por experiencia, que es imposible, alarga sus brazos e intenta tocar con sus nudosas manos el bello rostro que le sonríe, pero que, esquivo, continúa impasible su camino por el cielo.

  Poco después algo llama poderosamente su atención. Esta noche hay una nueva luz, más grande y brillante que cualquier estrella. Moon Watcher la observa, pero no alcanza a apreciar ningún detalle. Cansado, emprende por fín el camino de vuelta al refugio.

 

  Pero ese punto de luz no es una estrella, no es ningún astro natural. Quizá sea una nave espacial, un enorme navío de las rutas intergalácticas que efectúa una expedición de reconocimiento, estudiando las especies que pueblan el bullicioso cosmos.

  El tercer planeta despierta la curiosidad del sintético cerebro que gobierna la nave. Parece que una de las especies que habitan el planeta está en el camino evolutivo hacia la inteligencia. Pero, acosada por diversos peligros y dificultades, su éxito no está garantizado.

  Las especificaciones de la misión no aconsejan realizar maniobras para entrar en órbita y realizar un estudio detenido. Decide, por tanto, realizar un flyby y, en el punto de máximo acercamiento, enviar una sonda de clase 1 teletransportada para estudiar la situación sobre el terreno y, si es preciso, intervenir…

 Casi inmediatamente, la sonda, una especie de negra losa rectangular, aparece en una pequeña pendiente pedregosa que los australopitecos transitan habitualmente en su camino diario a la única charca cercana.

  El resto de esta historia, creo que ya la conocen…

Artículos relacionados:

¿Por qué 2001?
¿Por qué una obra maestra?
La vida a bordo de la Discovery
Esas diferencias 
¿Para qué sirve un monolito?
Una habitación sin vistas
Ponga un HAL 9000 en su vida

"Nuevo" trailer de 2001

Ciudades en la Luna
El amanecer del hombre

Más diferencias

El descubrimiento de TMA 1